Este año la Organización Mundial de la Salud realiza el llamado “Comprométete a dejarlo durante la COVID-19”. Esto hace referencia al consumo de tabaco aunque pueda resultar difícil, más aún con el estrés social y económico añadido que deviene por la pandemia, aún así existen “Más de 100 razones para dejar de fumar”.
La evidencia publicada este año por la OMS demuestra que los fumadores presentan mayor riesgo de infección y de desarrollar síntomas graves y morir a causa del COVID-19. Además, el consumo del tabaco al ser un importante factor de riesgo de enfermedades no transmisibles, como enfermedades cardiovasculares, cáncer, enfermedades respiratorias y diabetes, las personas que viven con estas afecciones y siguen fumando tienen mayor predisposición a presentar las formas más graves del COVID-19.
Los beneficios de dejar el tabaco son prácticamente inmediatos, ya que a los 20 minutos de abandono se observa una normalidad en la presión arterial y la frecuencia cardíaca. En las siguientes 12 horas mejora la oxigenación pulmonar y se normaliza el nivel de oxígeno que la sangre llevará a todo el cuerpo. Entre 2 semanas y 3 meses, mejoran el olfato, el gusto, la salud bucal, el aspecto de la piel, la circulación y la función pulmonar. De 1 a 9 meses, disminuye la tos y la dificultad para respirar. En 12 meses, el riesgo de enfermedad coronaria se reduce a la mitad. Entre 5 y 15 años, el riesgo de accidente cerebrovascular (ACV) y de enfermedad coronaria es igual al de un no fumador, y el riesgo de cáncer de pulmón disminuye a la mitad.
Si esto no fuera suficiente, existen muchas razones más para abandonar este hábito:
-El tabaco afecta al aspecto físico casi inmediatamente.
-Es una amenaza para los fumadores, pero también para la salud de su familia y sus amigos. ya que fumar o usar cigarrillos electrónicos o productos de tabaco calentado cerca de los niños compromete su salud y su seguridad.
-El consumo de todas las formas de tabaco son mortales y reducen la fertilidad.
-Al comprar tabaco, se apoya económicamente a una industria que explota a los agricultores y a los niños, y promueve la enfermedad y la muerte
-Fumar es caro: el dinero puede gastarse en cosas más importantes.
-El consumo de tabaco, y en especial el hábito de fumar, reduce la respiración, produce daños en el corazón y causa más de 20 tipos de cáncer.
-Los fumadores tienen más probabilidades de perder la visión y la audición.
-El tabaco daña casi todos los órganos del cuerpo y contamina el medio ambiente.
¿Qué medidas podemos ofrecer para disminuir esta epidemia?
Es importante concientizar a la población sobre los efectos nocivos del humo de tabaco para evitar el comienzo del hábito en los no fumadores y estimular el abandono del consumo en los fumadores para prevenir las complicaciones.
A su vez es necesario Implementar ambientes cerrados 100% libres de humo de tabaco para reducir la exposición en fumadores y no fumadores.
Finalmente, cabe señalar que existen tratamientos efectivos para dejar de fumar, que el ejercicio físico puede actuar como aliado y que pueden solicitar orientación sobre cesación tabáquica a la línea de ayuda 0800-999-3040 y consultando al centro de salud más próximo.